<p>Este libro del profesor Allan R. Brewer-Car&iacute;as, es el trabajo de preparaci&oacute;n de la Ponencia presentada en el Seminario organizado a comienzos de octubre de 2018 por la Universidad Carlos III de Madrid<strong>, </strong>sobre el tema: &ldquo;<em>El papel de la Justicia constitucional en los procesos de asentamiento del Estado democr&aacute;tico en Iberoam&eacute;rica.</em>&rdquo;</p><p>Siendo esa la misi&oacute;n primordial de los Jueces Constitucionales, de ser los encargados de defender la Constituci&oacute;n y asegurar la vigencia del Estado democr&aacute;tico de derecho, es ciertamente inconcebible que un Juez Constitucional pueda tener como misi&oacute;n la contraria, es decir, la de demoler las bases del Estado democr&aacute;tico de derecho. Sin embargo, eso fue precisamente lo que ocurri&oacute; en Venezuela durante los &uacute;ltimos 20 a&ntilde;os, donde el Juez Constitucional pas&oacute; a ser el m&aacute;s importante instrumento utilizado por el r&eacute;gimen autoritario para destruir la democracia.</p><p>Este libro estudia, precisamente, todas las sentencias del Tribunal Supremo de Justicia dictadas en tal sentido demoledor, las cuales encuentran como com&uacute;n denominador las bases del llamado &ldquo;<em>nuevo constitucionalismo</em> <em>latinoamericano</em>,&rdquo; que fue un proceso de subversi&oacute;n constitucional &ldquo;vendido&rdquo; a comienzos de siglo por un grupo de profesores espa&ntilde;oles tanto en Venezuela como en Ecuador y Bolivia. El tema, por ello, es tambi&eacute;n es objeto de an&aacute;lisis por el autor, a partir de sus comentarios sobre una Tesis &ldquo;secreta&rdquo; de doctorado sobre &ldquo;e<em>l nuevo paradigma constitucional latinoamericano,&rdquo; </em>que fue<em> </em>defendida en 2011 en la Universidad de Zaragoza precisamente de una de las magistradas del Tribunal Supremo corresponsables de toda la destrucci&oacute;n, y bajo la Direcci&oacute;n de uno de dichos profesores.</p><p>Por ello, el libro tambi&eacute;n da cuenta del bizarro procedimiento que el autor tuvo que seguir para poder llegar a estudiar dicha Tesis &ldquo;secreta,&rdquo; la cual seg&uacute;n el Archivo de la Universidad de Zaragoza aparec&iacute;a como que &ldquo;no autoriza consulta,&rdquo; lo que de por s&iacute; daba lugar a un a&uacute;n m&aacute;s bizarro hecho, que es que en una Universidad espa&ntilde;ola puedan existir Tesis doctorales &ldquo;secretas.&rdquo; Solo la existencia de normas de transparencia en la Administraci&oacute;n P&uacute;blica espa&ntilde;ola, le permitieron al autor tener acceso a la Tesis, y as&iacute; poder constatar toda la suerte de imaginables &ldquo;justificaciones&rdquo; y &ldquo;contradicciones&rdquo; entre el contenido de la Tesis &ldquo;secreta,&rdquo; y las sentencias dictadas con la participaci&oacute;n de la tesista.</p>